Initium E. Lucis

El calor del medio dia se sentia en el aire, ella, lentamente abrió los ojos.
Observó la habitación, no recordaba donde estaba ni cómo habia llegado hasta allí, no recordaba nada de nada. Se sentó en la cama, el estómago le ardía, la cabeza le daba vueltas, le costaba mantener los ojos abiertos y la cabeza en su lugar.
Se levantó y caminó hasta el gran ventanal del lado de la cama, miró afuera, estaba muchos metros por encima de la superficie terrestre, veia todos los techos y pequeñas personas paseando por las calles de esa ciudad que no lograba recordar, el sol estaba alto y quemaba. Se adentró nuevamente en la lujosa habitación, y buscó el baño con la mirada, caminó lentamente tambaleandose, encendió la luz se miro en el espejo iluminado, tenia el labial corrido, el contorno de los ojos totalmente negros, la boca le sabía a alcohol, a mucho alcohol, llevaba puesto solo ropa interior, de encaje negro. Se enjuagó la cara con fuerza y bebió mucha agua de la llave. Volvió a la habitación, aún no recordaba donde estaba, estaba preocupada, debió de ser una farra muy buena para no recordar nada de nada, buscó su ropa, ahi estaba en el suelo esparcida, un vestido negro, zapatos de tacón alto y un pequeño bolsito con brillantes, se vistió rapidamente. Un Hombre dormía en la gran cama roja desarmada, no pretendia despertar pronto. Caminó a la puerta y luego al acensor. Estaba en el piso 21, presionó el número 1, esperó. Se miraba constantemente en las paredes de espejo, para tratar de comprender. Llegó por fin al primer piso y camino hacia la gran puerta iluminada por el exterior. Un hombre se le acercó:
- Le pido un taxi señorita?
- Si, muchas gracias - dijo con la voz estancada en la garganta.
- Cual es su nombre señorita?
- Perdón?- Se sentia más mareada que antes...
- Su nombre, para pedir el taxi.

Ella...no recordaba nada de nada, ni siquiera quien era...