Entra en mi mente...

En un mundo lleno de cosas vivas y palpitantes es imposible guardar todos mis pensamientos para mi...

Es por eso que e decidido...compartirlos...

Gracias por leerme, Disfruta.

Atte Initius E. Lucis

Cocain Girls (capitulo VII)

Author: Gen ~ /

Quedaban dos noches para halloween el día de la pelea con Milene, ella habia pasado la noche entera en la enfermería y habian vendado sus heridas, como estabamos en tiempo de fiesta habian cerrado su castigo a quedarse en cama el día de la celebración, nada más.
Yo no quería saber nada de milene, no queria mirarla, ni sentirla...nada, todo habia cambiado, a Paz no le habia pasado nada malo, había venido a verme a penas salió de la enfermería, me tomó de la mano y me llevó a su habitación. Pasé con ella todo el día siguiente. En la tarde me fui con Nancy.

- Y tu? pensé que te habias muerto, te esperé todo el día.

- Dah...puros dramas, Milene está loca, casi mata a Paz y se estaba cortando, no se como hizo para zafarse del castigo...- Nancy rió- de que te ries?
- De tu cara! estás tan enojada, nunca te había visto así, creo que ahora si puedo imaginarte antes de ser una santurrona en un internado...- y seguía riendo, yo me acerqué a la ventana sucia y miré la calle gris, siempre parecia ser todo gris en esta estupida ciudad, y cuando todo comenzaba a tomar un poco de color llegaba alguien a arruinarlo, siempre lo mismo.
- Oye, ya está todo listo para mañana en la noche, tenemos todo lo necesario, y la plata tambien, eso es lo que importa no...que mágico esto de ser "la mafia" - y seguia riendo. La ansiedad y la exitación bañaban su rostro y sus ojos desquiciados normalmente, eran terribles. Astrid y Victoria entraron de pronto de la mano y riendo, Astrid se dejó caer en la cama y Victoria llegó hasta mi, me abrazó dulcemente, y me besó en el cuello.
- Hola querida- dijo dulcemente- cómo va la vida con Paz? si paz supongo...Milene está en crisis otra vez, la verdad esque no me canso de verla así- ese día todas parecian felices menos yo.

Esa noche, a mi pesar volví lentamente a mi habitación, en la puerta había un papel rojo pegado decía:
"Querida mía, esta noche no podré pasar por ti, mañana en la celebración nos vemos...será una noche fantástica, besos psicoticos. Paz"
Sonreí, todo era psicotico para ella, eso me hacía recordar donde estaba, rodeada de locas y criminales. Entré silenciosa. Milene estaba en la cama, acurrucada con su croquera sobre las piernas y dibujaba afanada, había quitado un par de dibujos de su pared, creo que en los que estaba yo. No me dirigió niuna mirada y yo a ella tampoco, me quité la ropa en silencio, y me puse pijama, me senté al borde de la cama con mi bolso, mi tesoro, y miré como todas las noches mi pasado, en mi cámara. Luego apagué la luz de mi mesa de noche, y me metí en la cama, antes de dormir eché un vistazo a la ventana de el frente, aver si por casualidad nuestras amigas vecinas se veian para saludar, pero sólo habia un papel que decia con letras grandes y rojas.
"No peleen más, las amamos"
No pude evitar sonreir, siempre fueron más felices que nosotras. Entonces me giré y dormí profundo.
Desperté el sábado de Noche de brujas bastante tarde, Milene ya no estaba en la habitación, me levanté perezosa, me vestí con la ropa que Victoria me habia regalado meses antes, corsets de cuerina o latex, y pantys rotas, ropa de mujerzuela había dicho, es la mejor.
Salí al pasillo y caminé hasta el comedor, el comité artistico ya hacía de las suyas decorando todo, ya había un escenario pequeño y equipo de amplificación. Comí en silencio y luego me encaminé a la azotea para fumar, mi placer últimamente era fumar, por lo general con Paz. Pero ahora subí solitaria, llegué arriba, el cielo más gris de lo normal auguraba una tormenta. Me senté en una de las bancas y lo encendí. Sentía la brisa humeda y miraba los autos abajo en la calle, entonces alguien rozó mi brazo desnudo, me giré rápidamente, era Milene. Con sus ojos oscuros y su silueta delgada.
- Ah, eres tú, que quieres?- dijé fríamente, vi el dolor en sus ojos ante mi brusquedad pero no me importó.
- Sólo queria verte.
-Bueno aquí estoy...
-Estás hermosa...
-Eh.....ok
- Toma, lo hice para ti- Me entregó una hoja de su croquera.
- Bueno, gracias- dije, y me giré nuevamente hacia la calle. Ella se quedó quieta un momento, y luego caminó.
Entonces miré el dibujo. Era yo, en el estilo que ella usaba, estaba sentada en una pradera blanca apoyada en un arbol muerto, y ella, en otra colina me miraba y agitaba los brazos, era un dibujo hermoso, casi sentia el calor del cielo rojizo, y la briza que alborotaba el piso blanco. Entonces la extrañé por primera vez en semanas, recordé el calor que ella me entregaba y la felicidad, Paz era agradable, pero era totalmente diferente. Bajé entonces, presurosa persiguiendo a Milene, para decirle cuanto la quería.
Estaba en la esquina para llegar a la habitación y choqué de frente con alguien, era Paz.
- A donde vas tan apurada hermosa?- me dijo riendo.
-A mi pieza, tengo que hablar con Milene
-Milene? para qué?
- Tengo que decirle un par de cosas
-Que traes aqui? - y me quitó el dibujo de las manos.- Oh...ya veo... que le dirás? que la quieres? Milene está loca cariño, no le sigas haciendo daño o terminará matandose.
- No digas estupideces Paz, la conozco mejor que tu, creo, ahora dejame.
- No te dejo querida, estás muy linda hoy, no te parece?- dijo suavemente, me tomó de la mano y caminamos hasta mi habitación y dejó caer el papel al piso mojado. Me apretujó contra la pared y acarició mi mejilla con suavidad- Así deberias verte más seguido... - dijo coqueta. Entonces alguien chilló enfurecida. Nos volvimos rápido, era Milene, al final del pasillo, miraba horrorizada su dibujo, y a nosotras, con odio. Recogió el dibujo del piso y arrugó enfurecida. Luego salió corriendo.
- MILENE!- grité- Sueltame Paz!
- Tranquila- decía paz, y me sujetaba con una fuerza extraordinaria. - No seas estupida siempre estarás mejor conmigo.
-DEJAME! - gritaba yo, temblando por la ira y el miedo, miedo de que Milene hiciera alguna estupidez. Pero Paz no me soltaba.
- Paula, escuchame...
- NO! dejame!!! porfavor, la necesito
- No, ven conmigo- Y me arrastró hasta la escalera y luego a la azotea. Ya era de noche y llovía, esperó que me calmara y dijo- dejala, es una estupida, sólo está celosa, ni siquiera te quiere eres su capricho, hace tiempo vine aqui, y terminé siendo, bueno digamos, una buena amiga de Milene, al tiempo llegó una chica a su cuarto, era tan hermosa como tu, de hecho se te parecía bastante, se hicieron amigas al poco tiempo, Milene la amaba, y se olvidó de mi de pronto, yo me sentía morir, entonces me decidí; tambien me acerqué a su compañera, y terminó queriendome tanto como tu creo, si esque me quieres, y la llevé por...un mal camino, tan malo que en una estupida riña en el comedor, ella bueno, se murió, de hecho, la maté yo...por eso me fui a la carcel por años, era una niña tonta... pero quería demasiado a Milene...

Ella ya se había enfrascado en su pasado y no veía nada mas, yo estaba horrorizada y asqueada, no entendía nada, nada de nada, Paz estaba más loca que todas mis amigas juntas, y sobraba, me volví en silencio a la escalera y bajé con lentitud, mi cabello goteaba, en cuanto a Milene, sería verdad que no me quería nada?... no, no podía ser, estaba y sigo estando totalmente segura de que Paz mintió en todo... así que me dirigí al comedor para buscar a Milene y explicarle todo, confiando en que siguiera con vida.
Los pasillos estaban totalmente vacios, un rumor lejano llegaba desde el comedor. Risas y música, porfin normalidad. Empujé con fuerza las puertas gruesas y lo primero que ví, sobre el escenario fue a mi...
Era yo en mi pasado, estaban proyectando las imagenes de mi vida... para el público, todo mi dolor y mis lágrimas en un espectaculo de circo... la ira nació en mi estómago y se abrió paso al corazón, y el dolor adormecia mis piernas y mis brazos, queria gritar y que todo el mundo muriera sobre todo aquella, la que sujetaba mi alma en sus manos... Milene.
Empujé a toda a mi paso, me daba lo mismo quien era, y llegué al escenario, Milene sombría seguía pasando las fotografías. Tomé sus piernas y ella cayó encima de la plataforma.
-QUE TE PASA!- gritó, pero cuando vió quien era su atacante cerró la boca tan fuerte que pensé que quiza nunca volvería a abrirla.
- MALDITA PUTA! CONFIÉ EN TI! ! COMO PUDISTE- gritaba yo, enloquecida mientras la golpeaba con toda la fuerza que podía. - PENSE QUE ERAMOS AMIGAS! PENSE QUE...- Milene no decía nada sólo gemía bajo mis golpes, entonces cuatro manos me sujetaron por la espalda
-Dejala! - gritaba Astrid y Milene que acababan de llegar corriendo por la puerta abierta- Dejala Paula no vale la pena!!- pero para mi si lo valía, mi vida...proyectada, no podria expresar el dolor que sentía dentro de mi, sólo queria, hacerla sufrir... Aprovechando el momento en que me sujetaron Milene salió corriendo al pasillo, cuando pude zafarme la seguí, iba directo al dormitorio, logré alcanzarla en uno de los pasillos, y la tomé por la ropa!
-DETENTE MALDITA!- grité
-dejame paula- dijo ella amenazadora- tu te lo buscaste
- PORQUE?! por no quererte como querías?! por mirar a PAZ?! QUE MIERDA TIENES EN LA CABEZA!? LOCA!- se zafó de mi y siguió corriendo.
Ya estabamos por llegar a la habitación y pude alcanzarla otra vez.
- COMO SE TE OCURRE MOSTRAR MI VIDA! confie en ti- lo ultimo lo dije en un susurro, el dolor lentamente le ganaba a la adrenalina.
- ya dejame...- repitió, veía en su rostro muchas cosas por decir que callaría.
- No te dejo milene! me traicionaste...
- tu me traicionaste primero...- su voz estaba tan cansada
- YO NO HICE NADA! no es mi culpa que tengas heridas abiertas.... y tampoco es mi culpa que Paz haya vuelto
- NO HABLES DE ELLA!
- Yo digo lo que quiero...me contó todo...aunque..
- Y LE CREISTE ES OBVIO!
- no! yo...
- DEJAME! eres una estupida! sueltame nunca más vuelvas a mirarme!
-MILENE!- Milene se zafó y corrio a la habitación... sonido de cristales, me apresuré a abrir la puerta tenía los brazos ensangrentados otra vez, el vidrio roto estaba por toda su cama, y nuestras amigas de enfrente miraban atónitas por la ventana.
- DEJAME! DEJAME O TE ENTIERRO ESTO EN EL CUELLO!- gritaba enloquecida bladiendo un trozo de cristal ensangrentado.
- Milene...porfavor- decia llorando, la abrazaba con todas mis fuerzas mientras ella se retorcia de impaciencia y quizás dolor, cómo saberlo.
- Déjame....
- Milene yo te quiero....tranquilizate porfavor- Milene no decía nada... y su respiración iba lentamente tranquilizandose
- Yo tambien te quiero Paula...nunca me dejes...
- Nunca...


La ansiedad por la mercancía de Nancy terminó en ese momento, y desde ese día el sol siempre alumbró mi vida, no más nubes de tormenta...

0 comentarios: