Entra en mi mente...

En un mundo lleno de cosas vivas y palpitantes es imposible guardar todos mis pensamientos para mi...

Es por eso que e decidido...compartirlos...

Gracias por leerme, Disfruta.

Atte Initius E. Lucis

Cosas de un sueño (IV)

Author: Gen ~ /

Pues despues de eso Sara esperó noche tras noche, sueño tras sueño, una nueva visita de él, el genuino hombre de sus sueños, con su cabello brillante hasta los hombros, su rostro brillante, y su cálida respiración.
Pero no llegaba, no aparecia, y poco a poco, ella olvidaba su hermoso rostro, y dejaba de sentir su cuerpo contra el propio, no queria...no podia olvidar algo tan hermoso, tenia muy claro que era un sueño, un simple sueño una fantasia...pero...

"es mas real de lo que parece"

Se aferraba a esas simples palabras cada noche antes de dormir, y cada mañana al despertar...

"Es mas real de lo que parece"

Pero nada, su corazon nuevamente se llenaba de tristeza agobiante y pesada, nuevamente sentia el mundo sobre sus espaldas, su unico escape desaparecia lentamente de su memoria, inconcientemente su hermoso rostro se deformaba dejando una vaga sombra, y su calidez se convertia en un suspiro que desaparece en un segundo.

Luego de dias y dias, y semanas y meses, el único recuerdo que quedaba de su amor, de su hombre perfecto era ... "es mas real de lo que parece", cada noche, seguia repitiendolo sin cesar, pero sin sentido aparente, solo...se habia convertido en un respiro de esperanza, en algo por lo que valia la pena seguir despierta. Pero ella ya no esperaba nada, mas que un suspiro.

Una noche, especialmente fria y neblinosa, Sara regresaba de su dia normal, preparó un baño caliente y estuvo ahi un par de horas, luego lentamente cepillo su largo y sedoso cabello negro, se miró detenidamente al espejo, algo sucedia dentro de ella, revoloteo interior, como miedo, o ansiedad, pero sin sentido...

Esa noche, olvido decirse "es mas real de lo que parece", y se durmió, primera noche en casi seis meses en que olvidaba la frase que la hacia sobrevivir...

Estaba en la cima de una montaña oscura, al rededor, se veia claramente nada...mas que una extension mas y mas grande de terreno vacio y tranquilizador, ni un soplo, ni un ave ni una respiracion... pura paz...entonces él aparecio, de la nada como siempre, Sara lo miró esperanzada pero no podia ver sus facciones, solo un par de ojos brillantes de color indefinido, vestia de blanco como siempre, ahi estaba, a un metro de distancia de ella, su corazon acelerado retumbaba en cada rincón del mundo silencioso de sus sueños. Y el se quedó allí de pie frente a ella, mirandola con sus ojos grandes y esperanzadores, lentamente, los recuerdos de sus sueños anteriores vinieron a su mente, y pudo verlo, los rasgos aparecieron, la nariz recta, los labios finos, su cabello brillante, su calor, su respiración, todo apareció, lentamente y allí estaba nuevamente mirandola sonriente, se acercó lentamente y la abrazó, la sostuvo en sus brazos en un abrazo infinito y hermoso, todo el amor del mundo en un solo abrazo...
De pronto todo volvia a la realidad, el mundo real se apoderaba de sus sentidos, pero Sara no queria, no podia dejarlo ir nuevamente, no podia despertar debia estar allí con el eternamente... Nunca mas me olvides......Nunca vuelvas a irte...

Es mas real de lo que parece


Y todo fue real nuevamente....
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Ese dia, Sara, no podia pensar, no queria nada mas que estar sola, asi que salió a caminar y caminar sin detenerse...

Al atardecer, acababa de subir el cerro de un parque cercano hasta un hermoso mirador, se sentó en el suelo esperando el ocaso, la danza de colores, cuando en la calle que bajaba el cerro un hombre se detuvo en seco, Sara dio la vuelta lentamente...

Allí estaba él, el hombre de sus sueños mirandola, en la realidad. El parecia tan perplejo como ella.

Sara se puso de pie, el se acercó, hasta quedar a un palmo de distancia como hacian en los sueños. Lo miró directo a los ojos brillantes, entonces él susurro

Es mas real de lo que parece...


Era Real...siempre lo fue

Un suspiro de esperanza...




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Dedicado a Diana....un suspiro de esperanzas para ti...

Cosas de un sueño... (III)

Author: Gen ~ /

Que no ubiese dado Sara, por no despertar jamás de ese sueño maravilloso, simplemente maravilloso, que no ubiese dado para que él no desapareciera nunca de su lado y la besara lentamente. Es deprimente estar en el mejor momento de tu vida, y que simplemente, desaparezca.

Esa noche, Sara dio vueltas y más vueltas en su cama, de pronto tenía mucho calor, de pronto mucho frío, de pronto todo le molestaba, vueltas y más vueltas y nada de sueño. Muy tarde, o mejor dicho muy temprano en la mañana, logró dormir, pero no hubo sueño alguno, solo un descanso agobiador interrumpido por el despertador.

Mal humor todo el día, tristeza y el mundo sobre sus espaldas, no pudo contenerse, lloró, pensando que era una estupidez llorar por algo irreal, por algo que solamente estaba en su cabeza, pero era tan real y tan perfecto, aun así no podia dejar de pensar en lo estupida que era, casi sintiendose enamorada de un hombre que ella misma había imaginado, esperando por él toda una noche, como una damicela espera a su principe azul en el balcón de una torre.

Esa noche se durmió, cansada de llorar toda la tarde, y hambrienta por no haber comido nada de nada...

Esta vez estaba vestida enteramente de negro, en una pieza vieja, ruinosa y húmeda, crecia musgo en las paredes, las ventanas sucias estaban rotas y la única puerta que habia estaba caida, y ella misma estaba andrajosa y desarreglada, sentia la presión del hambre en su estómago, y la palpitación de su cabeza dolorida.
Se dejó caer en una esquina sucia lentamente hasta el suelo, miró sus pies descalzos y enrojecidos por el frio. De pronto por los espacios en los vidrios quebrados entró una luz cegadora, tanto que tuvo que protegerse los ojos, cuando todo cesó, él estaba ahí, de pie junto a ella, vestido inmaculadamente de blanco, parecía brillar entre tanta oscuridad, Sara se levantó de prisa y lo abrazó, pudo sentir su calor, su corazon palpitante y el fino cabello de él, en su propia frente helada, entonces el tomó su delicado y pálido rostro entre sus tibias manos, la besó como nunca nadie en la vida real la habia besado, luego se separaron y el susurró en su oido

"Te extrañé...nunca más me dejes...nunca más me olvides"


Sara trató de articular palabra, pero nu hubo caso, simplemente sintío sus lagrimas pesadas sobre sus mejillas, lo abrazó lo mas fuerte que pudo, y así estuvieron hasta que llegó el amanecer, entonces el dijo

"Es mas real de lo que parece"

Y todo desaparecio...

Cosas de un sueño... (II)

Author: Gen ~ /

Es imposible concentrarse durante un día normal cuando algo, ya sea real o no, le deja a uno marcado. Sara, es una joven especial, amante de lo raro y paranormal, y para ella es normal emocionarse un día entero por un solo sueño, en la tarde de vuelta en su cómoda habitación, todo había desaparecido.

Tratar de conciliar el sueño luego de una película de terror y un trozo de libro bastante perturbador le llevó no menos de media hora….

Ahora estaba en un prado verde surcado por pequeñas florcillas amarillas y bañado por una brisa refrescante, no supo que hacer, el sueño no parecía avanzar y se sentía extrañamente conciente tal cual que en su sueño anterior, se dejó caer en la fresca y blanda hierva esperando que algo sucediese o solamente despertar a la horrible realidad. No lograba articular pensamiento. De pronto, un árbol nació de entre la fina hierba lentamente hasta tapar el sol, detrás de él apareció, nuevamente él, vestido de blanco perlado, con su brillante pelo hasta los hombros y sus ojos casi inconcebibles. Definitivamente el era el hombre de sus sueños… se sentó a su lado atónito igual que ella, y la miró con detenimiento, ella pudo ver sus delgados y lisos labios muy cerca de su pelo, él bajó la mirada y la sostuvo frente a los temblorosos ojos de Sara, ella quería decir algo cualquier cosa, con tal que el momento no desapareciera pero su cerebro no parecía atender a sus deseos, el tomó lentamente su mano y se dejaron caer en la hierba, mirando el cielo puramente azul y quieto, de pronto él se levanto, y acercó sus labios a los de Sara, iba a besarla, seguramente era el sueño más romántico que ella nunca tuvo, se acercaba, sentía su calor, de pronto él comenzó a alejarse lentamente por la hierba, en su rostro se notaba el desconcierto, un dejo de angustia, se arrastró involuntariamente girando en la hierba hasta el árbol que poco antes había nacido, cuando estuvo junto a él, se puso de pie y se dispuso a volver donde Sara pero de un momento a otro, el árbol desapareció, y el joven junto al árbol.

Esa mañana de domingo, Sara se levantó lentamente si poder olvidar el sueño, y por sobre todo sin olvidarlo a él, representaba todo lo físico que le agradaba en un hombre. Fue hasta el baño en silencio y se miró un largo rato en el espejo. Allí estaba ella, con su rostro blanco su nariz delgada, su boca rojiza y sus grandes ojos cafés, el pelo lacio y negro nunca se revolvía durante la noche, ahora estaba justo como ayer, liso hasta la cintura, se miraba como si nunca antes se hubiese visto, como si nunca antes hubiese reparado en su belleza, Sara había cumplido años un par de días atrás, 18 años de incomprensión y sufrimiento. Ella nunca comprendió a la gente, y la gente nunca la comprendió a ella, no tenía muchos amigos, ninguno decía ella, se juntaba a diario con un numeroso grupo de personas en las cuales no confiaba, volvía a su casa cansada y fría, comía sola en su habitación, leía lúgubres libros y veía aún más lúgubres películas, lloraba a diario, y cuando sentía que el mundo no cabía sobre su espalda, y sentía que moría o que necesitaba desahogarse, hacia cosas de las ke se arrepentia mas tarde.