Entra en mi mente...

En un mundo lleno de cosas vivas y palpitantes es imposible guardar todos mis pensamientos para mi...

Es por eso que e decidido...compartirlos...

Gracias por leerme, Disfruta.

Atte Initius E. Lucis

Detras de la escalera (cap. III)

Author: Gen ~ /

III. Ángel y Árbol

Paulo se sentó y miro a su alrededor, habían muchas colinas de mullido y brillante pasto verde, todas estaban vacías, ni una flor ni un árbol ni nada, el verde pasto se extendía liso como una alfombra, menos en una, en la que parecía la mas alejada de las colinas se divisaba un grande y viejo árbol sin hojas y una estatua con grandes alas abiertas. Paulo lo reconoció como el escenario que había visto desde el gran ventanal en el salón aburrido, se puso de pie y caminó en esa dirección, Hanngrell el niño-sombra había quedado en el piano allá arriba, Paulo alzó la vista, pero casi no se distinguía lo que había más allá de las esponjosas nubes, su sombra no decía nada, el piso no emitía sonido alguno, era como caminar por una mullida manta, Paulo solo escuchaba su respiración lenta y pausada, a Paulo le gustaba la tranquilidad.
Caminaba sin prisa y demoró un poco en llegar a su destino, allí se giro en busca del gran ventanal y allí estaba, muy lejano como incrustado en una colina especialmente alta. Paulo se sentó en el banco de plaza junto al árbol y delante del ángel. Paulo era un niño tranquilo no le gustaba mucho exaltarse a diferencia notable de su sombra que extendida a sus pies dijo con aire enojado
- si crees que me quedare aquí para siempre estas equivocado…-de pronto Paulo sintió un impulso que si bien movió su cuerpo, con autorización no fue. Sin querer Paulo se levanto del asiento, giro 3 veces a la izquierda, corrió adelante y volvió.
- es agradable hacer esto, nunca lo había intentado, lo haré mas seguido…
- oh claro que no- dijo Paulo y sobando sus brazos y su cuerpo como si sacudiera tierra de su ropa se despojo de su sombra, así es, la saco de sí, ahora había algo exactamente como el parado a su lado, y no estaba pegado a sus pies.
- ¡¿Qué cosas?!-dijeron a coro con voces idénticas. La sombra comenzó a correr hacia allá y acá con los brazos en alto, girando, cayendo, saltando y gritando.

Paulo lo miró un minuto en silencio. Desvió la vista hacia el ángel, ni siquiera lo había mirado, se subió a la banca para mirarlo mejor, era de piedra blanca, tenia rizos en la cabeza y manos delgadas, llevaba una túnica que le cubría del cuello a los pies, su rostro era bondadoso tenia ojos grandes que parecían brillar a pesar de la piedra, labios finos que dibujaban una leve sonrisa y nariz recta y elegante. Quedó embelesado, sin darse cuenta se había subido a la parte más alta del respaldo de la banca para mirar su rostro mas de cerca, las secas ramas del árbol estaban muy cerca, Paulo se apoyaba con una mano en una gruesa y oscura rama y con la otra en el hombro del ángel, volvió a mirar sus ojos de pronto el ángel grito con una voz chillona y alocada

- ¡¿QUIERES ENTRAR?!
- Yo…eh…-pero antes de responder, el ángel lo había tomado por los hombros i lo había puesto en el centro del árbol que se abrió y lo dejo caer por una especia de gran tobogán muy oscuro.

A Paulo, que le gustaba la tranquilidad esto lo desconcertaba un poco, pero solo quedaba esperar llegar a otro lugar.

Cayó por fin pero entre ramas y hojas llegó al suelo lleno de rasguños y arañazos, se puso de pie sobándose la espalda había caído entre raíces y piedras, avanzó un poco, el suelo se hundía al pisar como una cama elástica y Paulo daba pequeños saltos para hacer que el suelo temblara.

- es por la raíces- dijo una dulce voz de niña detrás de el
- ¿ah?- dijo Paulo y se volvió. Frente a el había una niña como se su edad, con pelo largo hasta el suelo de muchos colores brillantes, vestía de negro y era pálida como el azúcar, llevaba paletas acarameladas en cada mano y una pequeña montaña de pastillas y dulces la seguía de cerca como si ella fuese un imán. Paulo pensó que debía ser su sombra.
- Que es por las raíces que el suelo es así, además si yo fuese tu no haría eso, allá abajo viven pequeñas personitas…
- OH… esta bien- Paulo era un niño de pocas palabras y muy obediente.
- ¿quieres?- dijo ofreciéndole la paleta que sostenía en la derecha. A la invitación las tripas de Paulo retumbaron, había perdida la naranja quien sabe donde y cuando, el no se había dado cuenta.
- Mmm, bueno- su madre decía que comer dulces en la noche hacia mal, pero ella no estaba allí, además, recién arriba en el árbol era de tarde.

El bosque estaba rodeado de oscuridad, árboles y silencio, tomo un caramelo con forma de limón y lo llevo a su boca, la niña lo miraba con ojos ansiosos y brillantes.

- yo soy…Paulo- dijo con la boca llena y le extendió la pegajosa mano
- Sunniby, mucho gusto- y le dio un fuerte apretón, costo un poco separar las manos, cuando lo lograron siguieron comiendo en silencio. Por fin alguien tranquilo que no hablaba sin motivo.

Comieron mucho rato en silencio. Eran las 5:01 AM, Paulo pensó que su abuelo dormiría hasta el medio día como siempre, de ser así tenia mucho tiempo por delante.

- y ¿Qué haces por aquí niño? No siempre hay extraños…- dijo Sunniby con una voz que sonaba pegajosa.
- Mmm, en realidad no lo se…
- La ultima vez que alguien vino fue hace mucho, también era un niño como tu…el perdió su sombra por aquí pero la encontró, y perdió otra cosa también, algo que no era suyo, y nunca mas volvió.
- Ohm- dijo Paulo casi atorado por los dulces
- Ven vamos a conocer al Viejo…te va a caer bien

Lo tomo de la mano y comenzó a caminar por el camino, ella saludaba a pequeñas mariposas brillantes que revoloteaban…una en especial los seguía de cerca. Paulo pudo ver que las mariposas no eran sino pequeñas personitas con alas, la que los seguía llevaba algo en su pequeña mano que cada un rato miraba y decía para si:

- que bella que soy, adorable nena, mas hermosa que nadie, no existe nadie como tu…

Paulo pensó que debía ser un espejo…la personita también saludaba a las otras que revoloteaban y hacia el suelo también porque habían personitas caminando por ahí, no tenían alas pero eran igual de brillantes. La que los seguía pronto se poso en el hombro de Paulo y le dijo:

- ¿verdad que soy bella? ¿Verdad que si?- Paulo la tomo en su mano pegajosa y la miro de cerca, era extremadamente pálida, tenia el cabello rubio y ondulado y lo que pensó que eran alas, era algo parecido a una flor de origami pegada a su espalda, ella seguía admirándose en el espejo.
- Si, bueno, en realidad eres muy hermosa- dijo con una gran sonrisa en la cara y un poco colorado. Sunniby lo miraba en silencio. Lo tomo de la mano y le dijo:
- Vamos donde el viejote- y como Paulo era obediente se dejo arrastrar. Llegaron a un claro en el bosque, en el había una casita pequeña y gris, el sol brillaba en lo alto. Paulo pensó que como arriba en el prado verde el sol acababa de ponerse, debía de haber llegado aquí abajo, Paulo miro a su alrededor, era un niño sin sombra, pues esta lo había abandonado arriba. Caminaron hasta la casa.
- Oh, olvide mi llave- dijo con voz dulce y preocupada
- Yo tengo una llave por aquí- dijo Paulo tratando de ayudar-quizás sirva-la sacó era dorada y brillante, larga y fría y tenia grabados por muchas partes, no servia.
- Mmm, creo que tengo una mas en mi casa, vamos- caminaron de nuevo al negro bosque, allí entre los árboles había algo que no había notado antes, una negra y brillante casucha como de charol. Entraron, había muebles de todos los colores existentes, muchos dibujos en la pared y sillones esponjosos como las nubes.
- Aquí esta- dijo y salieron de nuevo.

Entraron pronto a la casa del claro, era pequeña también y todo parecía estar hecho de madera la chimenea estaba encendida y en una mecedora un hombre calvo se mecía.

- hola viejo, vine- dijo Sunniby- este es Paulo, me lo encontré en el piso del bosque- el viejo lo miro con rostro serio, se levanto de su silla y se acercó a pocos centímetros de su cara. Era bajito y rechoncho, tenía mejillas coloradas y ojos negros, en la calva cabeza tenia un dibujo un libro negro con dibujos en sus tapas.
- Buenos días señor- dijo Paulo
- Te pareces mucho a el- dijo sin atender al cortes saludo- creo que hasta eres el, si, si seguro que eres el.
- No entiendo que me dice señor- dijo Paulo desconcertado.
- Lo que pasa- comenzó Sunniby- es que el sabia todas las historias del mundo y todas las cosas acerca de el, entonces un día, el tenia tantas cosas en su cabeza que le comenzó a doler, porque habían muchas cosas y poco espacio, entonces decidió sacarlas de allí y ponerlas en un libro, porque es allí donde deben estar las historias, y así lo hizo y un día vino ese niño que quería saber todo del mundo y todas sus historias, y como este viejo es muy simpático, se lo prestó y le dijo que volviese al atardecer con el, y el niño se fue a leer por ahí, y volvió al atardecer, encontró su sombra y una llave en el bosque que dijo seria su tesoro por siempre jamás, pero perdió el libro y se fue, y como esta perdido ya nadie sabe donde lo dejo, y el viejo aquí quedo sin todo lo que ya sabia y tuvo que comenzar a aprender de nuevo…
- Oh…-dijo Paulo que era de pocas palabras, si quiere yo podría buscarlo…pero si nadie tiene una idea de donde estará, creo que poco puedo hacer.
- Yo escuche una vez que lo había perdido en la ciudad de los árboles, pero nadie va allí desde hace muchos años, creo que no se hacia donde está- dijo el viejo.
- Vamos entonces- dijo Paulo y salio con Sunniby.

Afuera, de la casa había un sendero que llevaba al resto del bosque. Era el único camino que se podía seguir así que lo siguieron, pues Paulo sabia que los caminos llevan a algún lado siempre. Y llegaron al bosque y en la entrada había un cartel que decía.

CIUDAD DE LOS ÁRBOLES -->
Tenga cuidado con el guardia y los mosquitos.
<--VALLE SUSURRO
No lleve ninguna almohada, ¡Hay muchas por el camino!


- Bueno, creo que encontrar el camino fue fácil- dijo Paulo sorprendido.

Caminaron un poco en esa dirección, pronto se encontraron un río color lila claro, era angosto y bajo, por lo que solo tuvieron que mojar sus tobillos, que quedaron tan lilas como el agua. Más adelante había árboles y más árboles. Entonces algo se movió entre los arbustos, Sunniby le apretó muy fuerte el brazo a Paulo. El se acerco al arbusto para mirar, la curiosidad de un niño es más grande que el miedo, y el frío y el hambre, movió las ramas y encontró un ser del porte de un perro, pero era ¡un mosquito! Entonces Paulo pensó que debían hacer caso al cartel y tener cuidado con los mosquitos. Entonces la poca luz que había se apagó y Paulo no podía ver ni la punta de su nariz.

- ¡QUIEN ESTA ALLI!- dijo una voz retumbante
- ehh…ssom…os Paulo y Sunniby
- ¡Y A DONDE VAN!
- Mmm…a la ciudad de los árboles
- ¡Y QUE HARAN ALLI SI USTEDES NO PARECEN NADA PARECIDO A UN ARBOL!
- Buscamos algo que se nos perdió
- ¿Ah si?- dijo la voz un poco mas calmadamente, entonces encendió la luz y caminó, era un hombre pequeño vestido de smoking negro, Paulo pensó que parecía un pingüino, tenia el ceño fruncido y poco pelos en la cabeza- pues a mi también se me perdió algo- hablaba retumbantemente aunque hablara bajito, parecía que tenia un amplificador en la garganta o algo- quizás puedan ayudarme a encontrarlo, si no, no pueden entrar a la ciudad.

Paulo pensó que el cartel se equivocaba en lo del guardia, no era nada temible.

Detras de la escalera (cap.II)

Author: Gen ~ /

II. La sombra de Paulo

- ¡Oye!, psss- decía una voz. Extrañamente Paulo medio dormido la oia exactamente como su voz- Paulo, pssss- Paulo no comprendía, era su voz despertándolo insistentemente, no quería despertar.

- ¡Pff! Este duerme más que el abuelo ¡Despierta!- Paulo fastidiado decidió abrir los ojos, esperaba estar en la cama, en la habitación que había sido de su padre, todo habría sido un sueño seguramente, pero no, estaba aun en la sala blanca vacía e iluminada, y nuevamente su sombra cubría las 4 paredes inexplicablemente.

- - Ya era hora! Me aburría de no hacer nada- Paulo giró para ver que hablaba con su voz, pero no violada mas que el negro pasillo y su sombra, aun decía estar soñando

- ¿y ahora? ¿no piensas hacer nada? ¿caminar? Mira que si no haces nada mejor me voy y te quedas solo- Paulo estaba desconcertado nadie estaba con el y sin embargo alguien hablaba.

- ¿Q, q…qui…en es?- dijo Paulo con un hilo de voz, parecía que nada salía de su garganta.

- ¿Como que quien? ¿Es que no me vez Paulo?, pues si es que no me ves es porque debes estar ciego pues yo estoy aquí y te estoy mirando, entonces tu también debes estar aquí ¿no?- dijo la voz misteriosas desde algún lado.

- ¿eh?

- Amigo, eres mas tonto de lo que pensaba, en esta habitación estas tu y tu sombra partida en 4, entonces si hay tu y esas 3 otras cosas no están hablando queda solo una opción y aquí estoy.

- ¿eh?- dijo Paulo, a Paulo nunca le gusto mucho eso de hablar- ¿es mi sombra la que habla?

- ¡Bravo!

- ¿Cómo puede ser?

- Obviamente, Paulo, compañero sabes poco de la vida y de las sombras como todos los hombres, ¿crees que estamos allí de adorno? Pues no, vivimos mientras tu vivas claro, y hablamos también siempre y cuando tu no lo haces claro esta, pero nunca nadie quiere escucharnos, creo que ustedes le dicen a nuestra voz “conciencia” o algo parecido…en fin ¿Qué hacemos ahora? Supongo que no nos quedaremos aquí toda la eternidad, habrá algo interesante que hacer allá afuera ¿no crees?-Paulo pensó que su sombra hablaba mucho porque tenia la voz todo el tiempo para el.

- Vamos entonces compañero- dijo la sombra, y Paulo obedeció, camino a la negra puerta por el oscuro pasillo corto y giro el pomo dorado, afuera estaba igual que antes, oscuro y frío. Camino a la derecha y giro la brillante esfera, la puerta cedió al instante, un camino blanco comenzaba justo allí, Paulo comenzó a caminar, cerro la puerta tras el, miro a su alrededor, era un paisaje de cuentos, estaba parado sobre un largo piano, en realidad sobre las teclas de uno, no había nada por ninguna parte solo nubes lejanas y esponjosas, el cielo parecía de atardecer, se acerco al borde del teclado para mirar abajo, el gran camino de piano flotaba en el cielo y allá abajo había un verde prado. Al caminar un sonido distinto salía de cada tecla y avanzando se hacia una tenue y agradable melodía, mas adelante el camino giraba, subía y bajaba y era lo bastante largo para no saber donde terminaría.

- Yo tengo hambre, deberías comerte esa naranja que tienes ahí- Paulo había olvidado la naranja de nuevo, y a voz de su sombra, recordó que tenia hambre también. Paulo siempre olvidaba cosas importantes, se sentó en una de las teclas negras que sobresalían de las demás, comió 4 gajos mas, el camino se veía largo y nunca se sabe cuando se acordaría que tenia hambre otra vez, aun tenia sueño, bostezaba continuamente, los ojos se le cerraban, se quedaría dormido otra vez y no podía hacer nada. Lentamente su cuerpo resbalo y recostado entre dos teclas negras se durmió…

- No otra vez…ou…- escucho la voz fastidiada de su sombra muy cerca de su oreja.

Algo tibio y gelatinoso le tocaba la nariz, era agradablemente molesto…

- ¿debería despertar ya?-dijo una voz aguda como de niño pequeño. Paulo no entendía porque nadie lo dejaba dormir en paz, el disfrutaba tanto dormir y nadie lo comprendía, pobre de Paulo.

- Es que en su familia son todos así-dijo su propia voz cerca de su oreja-duermen sin parar y sin descanso…

- Ohm-dijo la otra voz, la cosa extraña que le tocaba la nariz se sentía como meter la punta del dedo en agua tibia.

Paulo abrió los ojos y vio una cosa negra enfrente de el, se sobresalto y se levanto rápidamente, un poco aturdido. La cosa negra parecía un niño pequeño, mas bien la silueta de algo que parecía uno, unas cosas negras se desprendían de el de vez en cuando, en la cabeza donde debían estar los ojos habían dos agujeros que daban al otro lado, el cosa-niño-negro parecía haber olvidado que estaba con Paulo pues corría dando saltitos de aquí para allá haciendo una alegre melodía y reía como un bebe cuando una nota desafinaba, donde debía estar la boca había un agujero que se abría cuando el niñito reía. Pulo lo observo durante unos minutos sin decir, a Paulo que era de pocas palabras, no le gustaba iniciar conversaciones.

- ¡ven! ¡vamos!-dijo riendo el niño-cosa-negra y corrió dando saltitos derecho hacia delante, Paulo se quedo quieto.

- Yo creo, que deberías moverte, yo quiero ir allá pero si no te mueves no puedo además…

- Hablas mucho- le interrumpió Paulo que comenzó a correr detrás del niño-cosa-negra, hacían muchas extrañas melodías en el aire.

- ¿y quien eres?-le dijo la cosa negra a Paulo, pero antes de que alcanzara a contestar el niñito siguió hablando-yo soy una sombra, era de un niño que se perdió en el mercado y yo también me perdí, no se como llegue aquí- de vez en cuando soltaba risitas de bebe que resonaban en el cielo y hacían juego con las extrañas melodías de sus pies-¿Cómo te llamas?

- Paulo- dijo con voz agitada de tanto correr- ¿y tu? Ahhhhhh!- Paulo había dejado de correr, pues caía por el cielo, arriba se veía el final del camino, y arriba de el, la cabeza asomada de niño perdido

- YO ME LLAMO HANNGRELL!- gritó

Antes de que Paulo reaccionara ya estaba rebotando en el suelo, el piso era suave y blando como un colchón, se quedo quieto, muy cómodo en el verde pasto de la colina.

- no fue tan malo como pensé- dijo su sombra detrás de el. Paulo miro su reloj, eran las 4:17 AM.

Detras de La escalera (cap. I )

Author: Gen ~ /

I. La casa del Abuelo


Paulo había cumplido 8 años hace poco, las vacaciones ya habían comenzado y a falta de un mejor panorama las pasaría con su abuelo en su casa…

El día que bajo del taxi que sus padres habían pagado para que lo llevara al viejo, apartado y olvidado pueblo en el que vivía su abuelo, se dio cuenta de que prometían ser las peores vacaciones que jamás recordaría.

La casa estaba tal cual la recordaba, no parecía grande mirándola desde afuera, estaba vieja y desarreglada, hasta en un día soleado uno esperaba que una negra nube de tormenta la coronara, era tenebrosa, por dentro era totalmente extraña, el primer piso solo tenia 2 habitaciones, una que servia de estar era pequeña tenia muchos muebles repletos de figurines y elefantes de loza que obviamente no se limpiaban desde que la abuela, 7 años atrás, había abandonado al gruñón abuelo de Paulo por un joven rubio y musculoso, habían también unos sillones de tela rosado lleno de estampados extraños, la segunda pieza no era mejor había un baño pequeño, un montón de cajas cerradas y amontonadas que poseían infinidad de libros polvorientos, diarios viejos, una ventana sucia y la escalera.

A Paulo le desagradaba tanto llegar a la casa, olía a tabaco y polvo igual que el abuelo que cada vez estaba mas encorvado y arrugado. El abuelo lo esperaba en la puerta con un chaleco de lana totalmente inapropiado para el hermoso día que hacia, unos shorts a rayas y pantuflas. Cruzaron las salas u subieron al 2º piso, que era considerablemente más habitable. Era extraño que siendo el primer piso tan pequeño, este, el piso que se usaba, tuviera dimensiones tan excesivas, Paulo pensó que las casas ya sabían donde debían de ser usadas y por eso se extendían. Era un gran pasillo que tenía 12 habitaciones, seis a cada lado y que hacían de casa, estaba la cocina, el baño, el dormitorio, el comedor y todo lo que se necesita para tener una casa además de algunas piezas totalmente vacías.

La primera semana de estadía fue tranquila, el abuelo lo llevaba todos los días al añejo negocio de enfrente a comprar tabaco, galletas, pan y whiskey, en la segunda semana le ayudo a asear todas las piezas de la casa, la tercera a arreglar el jardín, allí se dio cuenta de que la casa estaba construida justo contra un cerro y el segundo piso entero estaba sobre el. Fue la cuarta semana que llego la desesperación, al abuelo parecía habérsele terminado las actividades y pasaba todo el día fumando pipa, leyendo el diario o viendo televisión mientras Paulo se aburría en la habitación que algún día en el pasado habría pertenecido a su padre. Una noche Paulo despertó sobresaltado y sudando, creía haber tenido una pesadilla pero no recordaba, se levanto y fue hacia el baño se lavo la cara para limpiar el sudor y sus tripas resonaron, miro su reloj de pulsera, eran las 2:03 AM, tenia hambre, se encamino a la cocina, en la habitación que hacia de living el abuelo se había dormido, otra vez, en el sillón con la televisión encendida, Paulo la apago y cubrió al abuelo con una manta, en la cocina cogió una naranja y salio, el piso era viejo y las tablas sobresalían, Paulo tropezó y la naranja salto de sus manos rodó por el pasillo y bajo la escalera, abajo se escucho un estruendo.

Bajo con cuidado las escaleras, había una oscuridad a medias, la luz se colaba por la ventana sucia y chocaba contra las cajas y montones de papeles creando figuras inexplicables, Paulo prendió la luz a loas pies de la escalera. Había caído una pila de khas levantando una nube de polvo que tardo en disiparse, había libros esparcidos por todas partes.

Paulo buscó la naranja con la mirada, no la encontró, movió las cajas y nada, entonces una brisa le llegó en la nuca, por el lado izquierdo de la sala que estaba repleta de más pilas de diario y cajas, en la pared de la escalera había una abertura oscura, Paulo se abrió camino, en el suelo al lado de la escalera estaba la naranja llena de polvo, la tomo y puso su atención en lo que se había abierto, una puerta pequeña que se camuflaba muy bien con las líneas que adornaban el lado de la escalera, la abrió esperando un armario y lo que descubrió fue totalmente inesperado.

Un pasillo de piedra de longitud desconocida comenzaba allí, una brisa helada le llegaba desde dentro. El tétrico pasillo estaba casi inmerso en la oscuridad y casi porque cada varios metros había una especia de antorcha o lámpara que iluminaba, sin pensarlo Paulo entro, apretando fuerte la naranja, cerro la puerta tras el, seguro que por la brisa al abuelo le vendría un dolor de cuello insoportable, apenas cerró, de la puerta callo una llave dorada y brillante, Paulo pensó que podría servirle cuando quisiera volver, la tomo y la guardo en el pantalón del pijama.

Camino durante un rato y el paisaje no cambiaba, Paulo pensó que el abuelo podría meter todas las cajas que tenia aquí, y se ahorraría mucho polvo que limpiar el próximo año, hacia frío y tenia hambre, se le había olvidado completamente que tenia hambre, peló la naranja sin dejar de andar y comió solo 4gajos, seguro que si era un viaje largo después le daría hambre de nuevo, y si no tenia nada para comer tendría que volver y no quería volver a aburrirse, el nunca fue un niño activo pero se aburría con facilidad, le gustaba descubrir, la curiosidad de un niño siempre es mas grande que el hambre y el frío.

Camino mucho rato, casi una hora calculo, a Paulo siempre le gusto contar las horas y los minutos de todo, estaba cansado y el sueño venia tras de el, estaba por abandonar cuando por fin algo diferente se veía, llegaba al final del pasillo y allá había algo más…

Faltaba poco para terminar el pasillo y trataba de adivinar que habría después, miraba pero el sueño y el cansancio hacían que no comprendiera nada, y llegó y observó, era un gran living antiguo como de castillo, con una gran chimenea, grandes sillones, dos ventanales cada uno a un costado, dos grandes escaleras y grandes retratos colgados en las paredes de gente narigona y bigotuda sin importar si era mujer u hombre el retratado. Sobre la chimenea había un retrato especialmente grande de un hombre mucho mas narigón que el resto, sostenía una gran copa de oro y observaba con ojos negros y opacos. Se acerco a uno de los ventanales, al otro lado se veía un paisaje de cuentos, había una colina verde un cielo de atardecer con nubes blancas y esponjosas, un monumento a un ángel de alas abiertas un banquito de plaza y un gran árbol seco. Desde el otro ventanal se veía solo una pared de ladrillos rojos, decepcionante. Entonces aburrió de esta aburrida habitación camino hasta la escalera de la izquierda del salón, estaba del lado del ángel, debía de tener algo más prometedor. Subió los grandes escalones de piedra y se encontró en un pasillo curvo con puertas, camino, eran tres puertas y el pasillo concluía en la escalera del otro lado del salón aburrido. Miro las puertas, eran idénticas, las tres de madera oscura y un pomo brillante dorado. Escogió la del medio, llamó, nada sucedió, entonces la abrió, un pasillo corto y después una pieza blanca, totalmente iluminada, por donde mirara veía a su sombra, giro muchas veces aturdido por el brillo de la pieza, se mareo y se sentó en el suelo, dejo la naranja a un lado apoyo la cabeza en la blanca pared miro todas sus sombras sentadas en todas las paredes que parecían mas bien espejos, cerro los ojos y sin alcanzar a darse cuenta de lo que pasaba, se durmió.


El Club del Suicidio (parte 6)

Author: Gen ~ /

Hasta el momento no habiamos afrontado ninguna de las murtes de cerca, claro lo sentiamos, pero no así. Las clases se pararon al día siguiente, el funeral fue al atardecer, su madre nos pidió que hablaramos pero ninguna fue capaz, Tamy lloraba como una magdalena y se notaba que habia llorado la noche entera tambien, Gaby se veia preocupada pero indiferente, yo simplemente no entendia nada de nada.

¿ Porqué Gaby actuaba asi?¿Como habia cambiado tanto la Tamy en un ato? ¿Y como es que jos se habia...como esque habia hecho esa estupidez? si siempre fue la mas cuerda entre nosotras.
El cortejo duró alrededor de una hora, la hora mas larga de mi vida. Habló su padre, su abuela, un par de amigos, finalmente el director del liceo hizo entrega de la Licencia de 4º Medio, que daba cuenta de lo joven que era y de lo que le faltaba por vivir.

Lloraba como nunca antes, estaba desesperada, en ese momento comenze a pensar que no mereciamos vivir sin ella, sentia una voz en la cabeza, una voz ajena a mi...
"Ella lo hizo por ustedes...porque las amaba, aun las ama...todo por ustedes..."
Gen...Gen

- ah?
- Gen, te llaman ven...
- Joselin dejó esto encima de su cama, lo encontre aller, tiene tu nombre...

La recibí, era una carta escrita en papel de cuaderno...

"Gen: Si lees esta carta es porque ya todo está hecho, disculpame de verdad, pero no se que hizo conmigo, no me siento yo misma desde que ella comenzó a hablarme, en este momento pienso que me falta mucho por vivir, pero no tengo deseos de existir, solo quiero desaparecer, no se que hacer, no quiero hacer una estupidez pero no puedo parar, me está obligando, dice que si las amo tanto como digo, tengo que hacerlo, y yo de verdad las amo...es por eso...

Porfavor cuidate y no dejes que haga nada contigo, cuidate de la gaby, actua muy raro...
Cuida a las chicas, habla con la gaby dile que no lo haga más...

De verdad no quisiera seguir, pero no depende de mi...

Te amo amiga
atte Jos"

Al día siguiente nos juntamos para conversar, el liceo habia suspendido actividades solo para el alumnado como luto, pero seguia abierto, pasabamos por alli en ese momento

- Voy al baño- dijo Tamy, y entró

- Ya se que fuiste tu...-dije a Gaby
- Era lo mejor
- No, claro que no
- Nunca hemos tenido nada que hacer aqui Gen...solo usabamos el espacio de alguien más...
- Estás cagada de la cabeza...mira lo que hiciste...causaste mas dolor del que pretendias curar
- Si...eso creo, pero...está dando resultados no? Yo las amo, por eso no quiero que sufran, prefiero que sufran los demas...era mejor ahora...que eramos felices...

Tammy demoraba mucho en el baño asi que entre a buscarla, gaby me seguia de cerca y me repetia
- Ella decide su destino Gen, no interfieras
- Cállate mierda...

Corri hasta el baño del Suicidio...estaba cerrado. Gaby habia dejado de seguirme. Corrí de vuelta hasta el subterraneo, por el pasillo hasta la sala. Tamy estaba en el suelo, sujetaba un cuchillo grande en la mano, en el suelo una poza de sangre resonaba con mis pasos la tomé en mis brazos. No se si aún vivia, pero sus ojos estaban fijos en los míos. La deje suavemente en el suelo, la cabeza me daba vueltas, queria vomitar, la ira recorria mis venas.

- Solo faltamos nosotras Gen, no demores mucho- Gaby habló desde un rincon, tambien se cortaba con una hoja de afeitar, la sangre le empapaba la ropa y goteaba hasta el suelo...

Yo no sabia que hacer estaba desesperada, mi corazon latia al cien, me costaba respirar, lloraba por chorros, me dolía todo, me sentía trastornada, queria gritar pero no podia, me tomaba la cabeza...todo me daba vueltas...

"ellas te amaban...acompañalas..sin ellas tu vida no es nada...si te quedas tu tendras la culpa y no sera justo con ellas...hazlo..hazlo ahora" retumbaba en mi cabeza la voz de un extraño.

Mire al rededor desesperada, no se que queria encontrar, encima de la mesa del frente de la sala, donde se habia recostado la niña de cabellos negros, habia una botella llena de liquido sin etiqueta, caminé hasta ella tambaleandome. A su lado una nota, con la letra minuscula y apretada de Gaby

"Te quiero amiga, no sabes cuanto...si de verdad nos amas tanto como dices, acompañanos...
Bebeme"

Un impulso vino a mi, una furia tremenda, pensé en romper la botella, en gritar y correr, pero cuando la tuve en mis manos, solo atiné a abrirla y beberla descontroladamente, me caia por la boca y me empapaba el pecho. Comenzó a arder de a poco, primero la boca, la garganta, el estomago, todo dió vueltas una vez más y cai al suelo. De pronto, sin que pudiera pensar en nada...todo se volvió negro.

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Dice el refrán "La curiosidad mató al gato", en este caso nos mato a todas...


Fin











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Dedicado a mis amigas del alma... En especial a Gaby por darme la idea de matarlas a todas...

El club del suicidio (parte 5)

Author: Gen ~ /

Despues de un par de semanas, la comunicación entre nosotras era casi nula, seguiamos juntandonos en el patio para el recreo, pero, el ambiente entre nosotras y en el liceo en general, estaba tenso.

Habian muerto ya 14 niñas en el ultimo mes, el baño del ultimo pasillo del primer piso estaba totalmente clausurado, y a diario acudian a el medicos forenses, investigadores, carabineros, y alumnas para recordar a sus amigas idas, habian mensajes en la puerta y las paredes de afuera. Todo el dia se escuchaban sollozos desde las salas y los otros baños, el silencio reinaba todo...era desesperante. Con tamy, conversabamos en privado, casi siempre ya, nos juntabamos despues de clase, segun nuestra cuenta, debian de quedar 3 niñas en el club, gaby, jos, y la de pelo naranjo ... que suponiamos era "Ella", y que por logica seria la ultima en "partir" como habiamos denominado a los suicidios.

Un dia Jos quizo salir a tomar una cerveza, para relajarnos un poco y olvidarnos de todo. Nos juntamos donde siempre, y fuimos a un bar, nos sentamos y comenzamos a beber, pronto la confianza habia vuelto y reiamos como antes. En un descuido yo hice caer un vaso sobre Jos que se empapo toda la polera, entonces la acompañe al baño a secarse. Ella se saco la polera de espaldas a mi, se secaba con confort, muy cuidadosamente para mi gusto, supongo que aun tenia un poco delicada la herida, yo revisaba mi bolso, una moneda se me cayo y me agache a levantarla, rodo hasta abajo del lavamanos, la levante y quede de frente al estomago de Jos...En el una herida brillante nueva, mostraba una fecha...la fecha era de mañana.

- Que chucha...- dije...
- Nada...no te preocupes...es solo para seguirle la corriente...de verdad no voy a hacer nada...es todo por la gaby, ella esta mal, quiero ayudarla...- dijo Jos
- Porfavor...no hagas una estupidez...te quiero mucho...porfavor...te lo pido- dije yo al borde del llanto. Se puso el chaleco que traia, y guardo la polera empapada en el bolso. Volvimos en silencio a la mesa. Despues de un rato y un par de cervezas, Jos dijo:

- Tamy...tengo que hablar contigo...- Y tamy fue. Demoraron poco rato. Cuando volvieron nos fuimos. Nos separamos, camine un rato de pronto mi celular sono, era tamy.

- ¿Estas muy lejos?
- No...porque
- Tengo que hablar contigo
- Bueno juntemonos...

Nos encontramos pronto, entonces ella...agitada me dijo

- Quiere que vaya...quiere que vaya con ella
- ¿Quien...a que?
- La Jos...quiere que vaya con ella, a esa cosa...me da miedo como esta...nunca tuvo problemas ni se vio afligida, ¿Viste como esta ahora? Esta pa la caga...y la Gaby ni parecido, parece que no le importa nada...de verdad estoy preocupada...que hago....
- Mierda...mmm no se...la Jos tiene una fecha en el estomago...y es de mañana...
- Mierda...entonces voy...asi no dejo que se haga nada...
- Pero...y si...te cagan la mente a ti tambien...
- Ja....no...si yo estoy bien....
- Mmm, anda...yo voy tambien y me quedo afuera...si algo pasa...me meto ya?
- Bueno

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" Nueva Muerte en Liceo de Niñas. Esta vez fue una joven de 15 años, murio como muchas otras a causa de sobredosis. La investigacion aun esta en pie, pero nada revela las causas generales de la ola de suicidios que se han llevado a cabo. Ella fue encontrada tambien en el baño del primer piso, que se encontraba clausurado, las autoridades estan considerando la opcion de terminar el año escolar esta misma semana"

- En que nos metimos...

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Al otro dia, nuevamente no nos encontramos en el dia. Pero un llamado de Tamy me informo de la hora y el lugar.

En la tarde, llegue puntual, camine a la esquina contraria a la entrada del liceo y espere, despues de un rato entro gaby, jos, y mas tarde tamy, que me miro desde lejos y entro. Espere unos minutos y entre tambien. Pero en el pasillo una inspectora me paro.

- A donde va mijita
- Eh...se me quedo algo en la mañana. Creo que en la sala- dije apresuradamente
- bueno, en que sala esta...yo la acompaño
- No, no esque no estoy segura de que fuese alli, puede haber sido en la biblioteca o en el subterraneo en la sala de musica
- Bueno, pero vamos yo la acompaño...no la puedo dejar sola por aqui considerando las circunstancias no cree
- Pero señorita si voy y vuelvo- Vieja de mierda...
- No, no, vamos las dos...

" Señorita Yuli, la llaman en inspectoria" Era un auxiliar al otro lado del pasillo. La inspectora me dejo, y fue alli.

Corri, al subterraneo, y por el tunel hasta la sala. Mire por una rendija de la puerta.
Tamy estaba sentada al frente de la sala. Lloraba desconsoladamente. Gaby estaba en un rincon, leyendo, y Jos... Jos no estaba...

Entre, bruscamente armando un gran ruido.

Tamy levanto la vista se levanto y corrio a abrazarme, en la muñeca le sangraba una herida con la inscripcion CS.

- Donde esta Jos?- Nadie contesto
- Gaby! Donde esta la Jos!?
- Dijo que se sentia mal y se fue...- dijo tranquilamente y siguio con su lectura
- Gen! No se que pasa...me siento terrible...nunca debi existir...solo hago mal al mundo...todo es mi culpa- decia tamy llorando en mi hombro
- No...no pasa nada...tranquila...
- Gaby....que mierda pasa...anda a buscar a la Jos...no vaya a aser una estupidez...
- Ella, hara lo que le de la gana sabes....cada uno decide su propio destino...
- Vamos mierda, parate de alli....- la agarre de un brazo y la arrastre contra mi, creo que hace semanas que no la veia con paciencia, alli frente a mi la vi. Estaba palida casi transparente, tenia los ojos metidos mucho mas adentro de lo normal, los labios palidos y resecos.

Arrastre a las dos conmigo por el pasillo, por las escaleras y hasta el ultimo pasillo del primer piso.

Llegamos, la puerta estaba forzada y entre abierta, la abri de golpe, ase mas de un mes que no entraba a ese baño, ahora estaba mas oscuro que antes, el aire pesaba sobre mi, mire al rededor, no se veia nada, recorri el pasillo mirando los cubiculos desesperada.
Entonces la encontre, en el ultimo cubiculo estaba jos, en el suelo en posicion fetal, tenia una botella de vodka apretada en la mano, un frasco de pastillas vacio un poco mas alla...mi amiga...mi amiga del alma, ya no existia mas.

El club del Suicidio (parte4)

Author: Gen ~ /

Ese mismo dia Jos habló en privado con Gaby. Esa misma tarde habria una reunión donde siempre, a eso de las 7 de la tarde, Jos la acompañaria, y le mostraria que no era nada, que mejor se salía de esa mierda y que todo estaría bien para siempre.

En la tarde nos separamos, gaby y jos sse fueron al subterraneo y nosotras con tamy las esperariamos afuera, pero, no nos aguantamos la curiosidad y despues de un rato bajamos tambien, llegamos hasta la puerta de la vieja sala subterranea y nos escondimos abajo de una mesa sucia, para escuchar, por la rendija alcanzabamos a ver algo.

"Esta es Joselin" dijo la niña con cabello anaranjado "y dime, ¿que quieres hacer con tu vida?", Jos no respondió nada, sólo miró fijo a Gaby. "Si no quieres hablar está bien, si quieres quedarte con nosotras tienes que hacerte una igual a esta - dijo levantando su falda - donde tú quieras y nosotras podamos verla, si lo haces, te ayudaremos a solucionar tus problemas, y a estar en paz. Hoy es un día especial, ayer, Jesenia decidió quitarse la vida, para mostrarnos que si podemos, que todo tiene solucion y que es la muerte, que la existencia no nos lleva a nada, solo a sufrir... Hoy, haremos algo especial..." Entonces ella tomó la mano de una niña bajita y delgada de cabello negro azabache liso y rostro pálido, lentamente la niña se desabrochó la blusa, dejando al descubierto un abdomen blanco como el papel, la marca CS, estaba a un costado del ombligo, era una herida nueva, me atrevo a decir que del mismo día unas horas antes solamente, aún sangraba, ella se extendió en una mesa cercana, entonces la niña de cabello naranjo, tomó una hoja de cortacartón, y comenzó a escribir en ella, cuando hubo terminado tomó un paño mojado y limpió la sangre con él, la niña palida se levantó con dificultad, y se paró en frente de las otras, tenia el abdomen irritado, la sangre corria por él, ella estab más palida que antes, tenía los ojos enrojecidos y los labios amoratados, la niña de pelo naranjo habia escrito sobre el ombligo una fecha, que revelaba tres días mas adelante de ese.

"Ella ha decidido, que desde hoy en adelante, para continuar y terminar nuestra labor, seremos sólo nosotras, solamente Joselin, si esque quiere quedarse, tendrá que invitar a la última que necesite una ayuda. Ella ha decidido tambien que cada una que cumpla su objetivo deberá dejar una fecha para la próxima, Jesenia ya estaba enterada y me dejó esta fecha y el nombre de la que sigue, cada una decidirá como hacerlo, pero debe ser entre las 5 y las 7 de la tarde en el baño del último pasillo del primer piso, donde fueron encontradas cada una de ustedes"

Jos y Gaby estaban sentadas en un ricón, Jose estaba pálida como nunca, Gaby, parecia indiferente como si eso fuese cosa de todos los días. Nosotras nos levantamos en silencio y fuimos a la entrada del liceo, a esperarlas.

- ¿qué pasó?- le pregunté a jos, con algo de nauseas
- Nada...creo que está todo arreglado...- dijo ella, con un tono extraño.
- ¿y tu gaby como estas?- preguntó tamy
- mejor que nunca- respondió, se despidió rapidamente y caminó delante de nosotras- Estoy apurada, mañana nos vemos.
- ¿que onda tú?- preguntó tamy a jos
- nada, em, me voy, nos vemos...-dijo ella y se fué.

Nosotras nos miramos en silencio bastante preocupadas.

- Mierda...-dije yo
- Exacto- contestó ella.

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Al día siguiente, todo fue bastante normal, actuabamos como si nada ubiese pasado, cuando salimos de clase, en el callejón que frecuentabamos, tamy preguntó:

- ¿Quién es Ella?
- ¿Quien?- preguntó jos
- Ella, ayer, bajamos con la Gen, a ver que onda, y hablaron de Ella- respondió
- ¿que vieron?- preguntó gaby, con preocupación en la voz, antes de que tamy respondiera yo dije.
- nada, si bajamos y escuchamos eso nomas...algo como "ella ha decidido que terminaremos nosotras o algo"... Entonces se empezaron a mover y nos fuimos, no nos fueran a pillar- dije rapidamente mirando a tamy.
- ah....ella es como la jefa del grupo- dijo gaby- pero nadie sabe quien es
- ah...¿hoy nos jutamos más tarde?- dijo tamy
- no puedo...- jos
- yo tampoco- gaby
- pff...nos vemos mañana- dije yo, y me fuí. Más tarde llame a tamy y le dije que nos juntaramos afuera del liceo a eso de las 5, que queria hablar, ella aceptó.


A las 5 y tantos nos encontramos allí, y nos fuimos a la esquina, ella prendió un cigarro.

- Ojala, no pase nada...- dijo ella
- claro, pero la otra mina se va a matar mañana...¿que hacemos?- dije yo
- y que vamos a hacer....la mina está cagá de la cabeza, y no nos va a aser caso nisiquiera nos conoce, a mi me da igual mientras a las chicas no les pase nada- dijo ella
- mira- dije yo. Afuera del liceo estaba jos y gaby, se saludaron y entraron. Tamy, se fumó el cigarro más que rápido y fuimos. Entramos, ellas caminaban por el pasillo del internado, caminaron hasta el fondo y entraron a un baño, nosotras nos quedamos afuera.

- ¿donde lo harás?- dijo Gaby
- no sé, donde no se den cuenta- Jos
- Mmm, yo creo que en el estomago, donde lo tenía la otra mina, asi te tapas con la falda- Gaby
- si, si, allí entonces, gracias por ayudarme en esto, sola ni cagando- Jos
- Ja, que eres tonta, para eso estoy...cuando me necesites- Gaby

Entonces jos, levantó la polera, y desabrochó un poco su pantalón. Se estiró con los brazos apoyados en un lavamanos, entonces gaby, sacó de su bolso, una hoja de afeitar y comenzó. La sangre corría pero ella se secaba con confort antes de que llegara a su ropa, caian lagrimas por su rostro, apretaba los labiós tan fuerte que se le blanqueaban, y las manos apretadas sobre el lavamanos estaban rojas. Cuando gaby terminó, jos se limpió con un paño humedecido, entonces abrazó a Gaby y le dijo:

- Gracias por ayudarme

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Al otro día, tamy y yo no sabiamos que hacer, en el recreo estabamos sentadas en el lugar de siempre bajo el sol. No hablabamos mucho, tamy y yo nos mirabamos a ratos, y mirabamos el abdomen de Jos, nos imaginabamos la herida abierta bajo la blusa.

- Hoy se mata alguien- dijo gaby. Nadie respondió

A la salida, gaby no pasó al callejón, Tamy y Jos fumaban tranquilas.

- Jos...- dije yo
- am?- ella
- ¿en que estabas pensando?- yo
- ¿porqué?- ella
- Ayer vimos lo que hiciste...no caigas en eso, es pura mierda- dije yo
- No me sigan nunca más...lo hice por otros motivos no por lo que creen, no le digan a la gaby lo que vieron, si llega a pasar algo con ella, me muero...lo hice sólo por ella- Jos
- Que chucha...- dijo tamy muy preocupada.


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Esa noche...
" Muerte en Liceo de Niñas, la joven de iniciales D.S se suicidó esta tarde en un baño del Prestigiado liceo, escribió "te odio" reiteradas veces en su cuerpo, hasta que desangrada abandonó la vida, El medico Forense a cargo afirmó que su muerte se produjo aproximadamente entre las 6 y 7 de esta tarde. El cuerpo sin vida fue encontrado por una compañera, que avisó a la inspectora de turno"

- ¿Viste las noticias?
- Si...

No hablamos en todo el día, ni siquiera nos encontramos a la salida, era Lunes.
Y los días siguientes no fueron mejores.

" Muerte en Liceo de Niñas......a causa de sobredosis"
" Muerte en Liceo de Niñas......se asfixio con una bolsa de plastico"
" Muerte en Liceo de Niñas......Desangramiento"
" Muerte en Liceo de Niñas.......Causa desconocida"

Y así semanas y semanas, todos entre las 5 y las 7 de la tarde, en el mismo baño del primer piso, que hasta fue clausurado, y denominado por el alumnado "El Baño del Suicidio", Cada tarde o mañana, el baño aparecia abierto, y con una mina muerta en el piso...


Hasta donde nos dimos cuenta con Tamy, el club contaba con 16 o 17 niñas...

Hasta la fecha, habian muerto ya, 11. Quedaban pocos cupos...

Comenzabamos a preocuparnos deveras...

El club del Suicidio (parte3)

Author: Gen ~ /

Al dia siguiente, no nos vimos hasta salir de clases, nos fuimos a un parque cerca y nos sentamos bajo un árbol.

- Cuenta que pasó pos- Tammy
-Es Verdad- Dijo Gaby, fue una sorpresa, creo que ninguna esperaba que pasara algo.
- y... que onda-yo
- la mina me llevó al subterraneo del liceo y caminamos un poco por el túnel que hay hasta una sala, habian varias niñas conversando ahi, la mayoria eran chicas como de primero. Entonces la mina me llevó adelante y me dijo que me sentara, y les habló y les dijo como me llamaba y me preguntó que queria hacer con mi vida y yo no sabia que decirle, estaba nerviosa, y no se me ocurrió qué contestar y me dijo que si no queria hablar estaba bien...entonces se levantó la falda y me mostro el muslo, y en el tenia tallado CS, estaba casi cicatrizado pero se veia irritado y me dijo que si queria quedarme con ellas tenia que hacerme una igual donde yo quisiera y ellas pudieran verlo, y me dijo que si lo hacia ellas me iban a ayudar a olvidarme de todos mis problemas, entonces me fui.
- mierda...-dijo jos mordiendose las uñas- y...¿que piensas hacer?
- bueno...no sé...yo me las arreglo
- ni cagando dejo que te cortes, te aviso- dije yo, enojada
- no se, ahi veo, me tengo que ir- entonces se despidio de todas y se fué.

- creo que...le afectó..o ¿alucino?- tammy
- yo creo, que lo dejamos hasta aqui, si era un capricho una duda nomás y ya fue- Jos
- demás, si después le pasa algo .... no me lo perdono- dije yo- bueno, entonces mañana hablamos con ellas...¿quieren papas?

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El día estaba caluroso, en el recreo estabamos reunidas como siempre, por el calor llevabamos solo blusa.

-¿Que tienes ahi?- dijo jos, nadie respondió- ¡Gaby! ¿que tienes ahi?-entonces todas la miramos.
-¿donde?- y se reviso el cuerpo
-en la muñeca....¿que tienes?- ella se miró las muñecas
-¿Piel?- Tamy y yo reimos, Jos se abalanzó sobre ella le tomó el brazo izquierdo y le levantó la blusa. Allí en el costado de la mano algo rojo resplandecía al sol.

CS, los cortes eran nuevos, cuando ella movía la mano las heridas se abrian. Creo que eso nos dejó en shock, no dijimos palabra hasta que el recreo terminó, no podiamos evitar mirar la herida abierta a cada minuto para comprobar que nuestros ojos no nos engañaban, cuando el timbre sonó todas nos separamos cabizbajas y en silencio.

¿En qué habiamos metido a nuestra amiga?...

En el segundo recreo Gaby no bajó, pudimos conversar más tranquilas.

- yo creo...que eso es grave- dijo tamy
- mmm- dijo jos con cara de preocupación.
- supongo que lo más conveniente es sacarla de ahi, me asustó caleta...- Yo
- ¿pero cómo? quizas que mierdas les dirán allí, yo cacho que les meten cualquier idea en la cabeza y como están mal, les afectan...- Jos
- entonces alguien va a tener que ir con ella... y mostrarle que todo es mentira y que no pasa nada- Tamy
- Pero...¿quién?- Yo
- Después hablamos...

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Despues de clase, estabamos en un callejon que frecuentabamos, nos disponiamos a hablar con Gaby de todo cuando ella habló primero.

- En el recreo una mina que va me dijo que hoy alguien se iba a matar...pero no se quién...¿que hacemos? Si esque es verdad va a ser la primera del grupo en hacerlo...- dijo ella
- Oh...están cagadas de la cabeza- Tamy
- Pero...capaz que no se atreva...apuesto que no le dá y como no lo va a hacer...las otras se van a desanimar o les va a entrar el pánico y todo va a terminar - dije yo...
- Ojalá...- Jos

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En la tarde, miraba las noticias regionales y de pronto:

"Tragedia en Liceo de Niñas. Esta tarde una joven de 16 años de iniciales J.H ha muerto en un baño del prestigiado liceo. Juan Morales, policia a cargo del caso afirma que se trata de suicidio. Los medicos lo afirmaron diciendo que fue a causa de una Sobredosis de Sedantes"
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- ¿Vieron las noticias?- dijo jos cuando nos encontramos en la mañana, Gaby no habia llegado aún.
- Si...parece que va en serio la cosa...- Tamy
- Entonces una de nosotras va a tener que ir con ella...para sacarla...ya la cagaron- Yo
- ¿Quién va?- Tammy
- Yo...yo voy- Jos...entonces entramos al liceo y nos separamos.



El Club del Suicidio (parte 2)

Author: Gen ~ /

Vinimos despues de la jornada de la tarde, segun lo que habiamos investigadoera ese el baño de encuentros justo a esa hora, tamy conocia a la mitad de la comunidad escolar y pudo conseguir datos interesantes, mas bien mitos liceanos.
El baño estaba totalmente a oscuras, gaby estaba en un rincon acurrucada, lloraba, tuvimos que hacer bastantes cosas para hacerla llorar pero al final resultó, nosotras tres, las agentes externas estabamos apretujadas en uno de los cubiculos de el medio, la mirabamos por la rendija de la puerta,hacia rato que esperabamos, estabamos aburridas y frustadas cuando, pasos ligeros se escucharon desde el pasillo, lentamente se hicieron más fuertes y llegaron al baño, nosotras subimos a la taza sucia.
En la puerta habia una silueta de mujer joven, delgada y larga, llevaba tambien uniforme, se acercó a gaby con un paso lento y arrastrado, creo que queria aumentar el suspenso, nosotras tratabamos de no existir, de no respirar, de no hacer ningun ruido, pero me parecia escuchar además de mis latidos los de mis amigas junto a mi, parecia que todos latian al mismo tiempo, afuera la joven estaba de pie frente a Gaby, se miraban detenidamente, la poca luz que se colaba por la ventana de la pared hacia formas extrañas en sus rostros, el de Gaby estaba brillante por las lagrimas, la joven tenia la piel pálida y el pelo hasta los hombros de un color que en la oscuridad parecia naranjo.

- Estas bien?- preguntó ella con una voz dulce y melodica. Gaby la miraba desde el suelo, creo quenego con la cabeza o le hizo un gest1o con el rostro, no me di cuenta. La joven extendio su palida mano hasta la altura del rostro de gaby, ella levantó su mano temblorosa y brillante tambien por las lagrimas que habia limpiado, la joven la tomó y la levantó del suelo.
- Yo te voy a ayudar, bueno?- dijo consolandola, la tomó por la cintura y la arrastro junto a ella en la oscuridad. Apenas salieron del baño las seguimos de cerca, escondiendonos tras los pilares y las puertas. Cuando llegamos al pasillo del comedor, tuvimos que quedarnos atrás, el piso es de madera y hace mucho ruido. Ellas caminaron lento y arrastrado, Gaby de vez en cuando giraba la cabeza para mirarnos allá atras, las pocas luces de afuera revelaban en su rostro un gesto atemorizado, cuando ellas llegaron al final del pasillo, giraron a la izquierda y desaparecieron, caminamos el pasillo lo mas rápido que pudimos pero cuando llegamos allá ya no habia rastro de ellas.
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En realidad, existian dos opciones, una era que todo fuera verdad y que habiamos metido a nuestra amiga a un club suicida, y la otra era que todo era mentira y la misteriosa joven peliroja era una de las enviadas de la psicologa del liceo, una mujer regordeta, sobreactuada, sobreproducida y muy feliz, esperabamos que no.
Estabamos en el portal del liceo, la tarde estaba fría, y estabamos nerviosas, jos y tamy ya habian fumado casi una cajetilla completa y yo trituraba papeles sobre mi falda para pasar el tiempo, habiamos estado un buen rato alli afuera, media hora como minimo, cuando la gran puerta del liceo se abrio lentamente y desde adentro salió la figura delgada de Gaby, su cara no decia nada, se acercaba lento, como siempre, para nosotras demoro un siglo en bajar los escalones de piedra y llegar a nuestro lado, al llegar dijo:

- La verdad, no quiero hablar ahora, si quieren vamos a mi casa, pero ahora no.
- Pero es tarde, me matan si llego de noche a mi casa-Tamy
- Si, igual- Yo
- Entonces hablamos mañana, no la molestemos bueno?- Jos

Nos despedimos en la esquina y partimos en direcciones diferentes.

Al parecer algo habra pasado, para que quedara en ese estado digo yo. Esperaba fervientemente que si, casi no pude dormir esa noche, y creo que mis amigas tampoco...

El club del Suicidio

Author: Gen ~ /

La vida da vuelcos inesperados, todo comenzo como un juego, nunca pense que todo terminaria tan mal, de hecho nunca pense que terminaria así.
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El sol ya estaba ocupando el cielo nuevamente, eran los primeros dias de septiembre, la primavera se veia venir. Estabamos en el Patio Nº2 de nuestro antiguo y gran liceo, era nuestro ultimo año, y desde el primer dia nos quejabamos de la poca aventura que reinaba nuestra vida.

Los quince minutos pasaron volando, el timbre retumbo, nos levantamos de nuestros lugares en el circulo habitual, antes de subir decidimos ir al baño, uno pequeño y oscuro del final del pasillo, entonces cuando Jos ya habia terminado sus nececidades, Tami dijo:

- Oh!...cacha weón, lo que dice aquí- todas nos acercamos a leer.

"El Club del Suicidio está aqui" estaba escrito en rojo en la pared de un cubiculo. Algo interesante por fin.

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- Media volá, y si es verdad?- Tamy
- Mmm, yo creo que es cosa de esas pendejas aburridas nomas, que quieres que te diga- Jos
- Ah, pero seria genial si fuera verdad, la raja- Yo
- Yo no creo nada de eso, estan todas locas las niñitas de ahora- Gaby
- Ah, que eres fome, pero investiguemos, ya? ya?- Tamy
- Jaja, yo me anoto, si igual es interesante- yo
- Será- Jos
- Me da igual- Gaby. Gaby siempre fue callada, a diferencia de nosotras, por lo general las diferencias hacen una amistad posible.

Decidimos, entonces, por decision casi unanime que investigariamos, si era verdad la raja algo interesante que contar mas adelante, y si no, pues nada. Nos juntariamos en la casa de Gaby a conversar como siempre, alli nunca habia nadie, entonces nadie nos molestaba, nuestro refugio grupal.

- Ya?! y entonces que hacemos?- Tamy, tenia un vaso vacio en una mano y un cigarro encendido en la otra. Se veia entusiasmada, un poco mas de lo normal.
- Pero, alguien investigo algo?, primero hay que saber si de verdad existe- Jos, abria una botella mojada de cerveza para comenzar a servir, siempre comenzaba por ella, a nadie más le gustaba la espuma.
- Si, yo he escuchado que si existe- Gaby, con su voz casi inaudible. Nosotras con el tiempo habiamos ajustado el oido casi al de una onda de murcielago para poder escucharla.
- Bueno, entonces, hay que hacer algo- yo no podia guardarme la emocion, siempre he sido miedosa pero debo admitir que la adrenalina de algo nuevo me entretiene.
- Carnada- Dijo Jos.
- AH?- dijimos todas.
- Carnada, como en las peliculas pues, siempre hacen eso, y de existir, deberia funcionar no?- Jos de nuevo.
- Claro, pero quien?- Yo
- Nadie que no se encuentre aqui, es nuestra aventura- Tamy. Nadie decia nada, Jos terminaba de servir mi vaso, el ultimo. Creo que todas pensabamos lo mismo, nuestras mentes se conectaban a veces, Gaby, era la indicada, todos la veian como la niña oscura y media depresiva, por su forma de vestir parecida a la del Medioevo. Nadie decia nada aún.
- Pues, yo creo que la Gaby o no?- Tamy sacó la voz
- Si, ademas, si fuera cierto, ninguna de nosotras deja que te pase nada- Jos
- Si yo se que igual quieres, es emocionante- Yo. Pasó un momento.
- Bueno...- Dijo Gaby con voz duditativa. Las caras de satisfaccion eran inconfundibles.
- Entonces, un brindis, Por la Amistad- Dijo la Tamy
- Por la casa de la Gaby- Yo
- Por la Gaby- Jos
- Por..."El club del suicidio"- Dijo Gaby, reimos, tomamos nuestra cerveza helada en silencio.

Eramos tan felices...

Ella... (parte 2)

Author: Gen ~ /

- Mejor me ire caminando, necesito respirar- dijo ella.
- Bueno señorita coomo guste, nos vemos pronto no?- Dijo con una sonrisa maliciosa en el rostro. Ella no comprendió el porque.

Caminó por la calle abarrotada de vehiculos y de gente apurada. Sentía que caminaba en contra del transito humano, todos la empujaban y chocaban, se sentia débil, y abandonada.
No era facil no saber nada de nada hacerca de ella. Era confuso.
De vez en cuando un hombre la saludaba.

- Hola mijita, que tal la vida?
- Señorita tanto tiempo, y el trabajo?
- Mi niña, cuando nos encontraremos denuevo?
- Hola! tanto tiempo sin verte, ya comenzaba a extrañarte.

A los que ella devolvia una sonrisa finjida y afligida. Ninguno parecia cercano, pues decian eso al pasar y se perdían en el gentío. Caminó derecho mucho rato, no se le ocurria a donde ir ni que hacer hasta que una mujer alta, muy atractiva la tomó del brazo y le dijo con voz casi preocupada pero severa:

- Donde te habias metido niña? debes llegar a las 10 am, sin retraso, tu lo sabes son las reglas, si no lo cumples...ya sabes- pues no, ella no sabia, no recordaba nada, y poco le importaba un castigo si nisiquiera recordaba quien era ni que hacia.

La "arrastro" por calles y calles, bajando estatus sociales, hasta que llegaron a las que parecian las que mas guardaban secretos, las mas oscuras...las calles sucias...Llegaron a una gran casona antigua, pintada de azul, con barrotes artisticos en las ventanas, era una gran edificación con 4 pisos, nada se oia desde dentro. Entonces la mujer rubia abrio la puerta. Una ola de olores mezclados las cubrió, olia a tabaco, a mujeres, a sudor, a alcohol, a todo... Entraron...

- Vas a cambiar de habitación, porque.....- la mujer comenzo a hablar sin parar, Ella no entendia mucho, miraba a su alrededor, muchas piezas, muchas mujeres por ahi, un gran salón con un piano y un bar inmenso, mas piezas, camas deshechas, mas olores mezclados que le hacian temer por su identidad- por eso dormiras en la pieza que era de la pepa, como se embarazo la muy bruta- Ella, le miró con cara de duda- ahi, niña no se que te pasa, estas como en el aire, quizas que te dio el viejo ese que te dejó asi, ya ven, yo te llevo, necesitas descansar.

Subieron hasta el tercer piso, en este piso se escuchaban mas ruidos, risas y voces graves.

- Aqui es niña - dijo la mujer
- eh, bueno, bueno- dijo Ella y entró. Cuando la mujer se alejó, ella salió y se acercó a la habitación del lado para mirar por la rendija de la puerta, Habia una cama grande y en ella, una pareja teniendo relaciones, sorprendida caminó hasta la que seria su habitación y se sento en la cama, depronto el sonido del lado cesó, un rato despues se oia:

- Muchas gracias mijita...¿Cuanto le debo?

En ese momento ella, aun sin recordar nada, pudo concluir algo...Ella era prostituta....